Espacio Territorial

LIBERANDO Y RECUPERANDO EL SENTIR Y EL PENSAMIENTO DESDE LA KWET IPX

“La investigación no parte desde lo físico si no desde el sentir”

El 5to encuentro de Tulpas Territoriales de Comunicación Propia se llevó a cabo los días 26, 27 y 28 de febrero en el territorio de San Francisco, Cauca vereda la Betulia en el Centro de Educación, capacitación, investigación para el desarrollo integral de la comunidad CECIDIC, uno de los sueños cumplidos del Padre Álvaro Ulcue Chocue y una de las tantas tierras que por allá en los 80 fueron recuperadas y liberadas de los terratenientes con el fin de crear espacios donde los jóvenes pudieran formarse, compartir la palabra y fortalecer la identidad cultural del pueblo Nasa.

El territorio cuenta con alrededor de 12 tulpas encaminadas en la orientación desde la comunicación con los espíritus y el fortalecimiento del ejercicio de gobierno propio desde el Kwe Kwe Nejesx, son espacios para conversar, pensar y quemar todas las desarmonías y enfermedades que llegan a la comunidad. En el CECIDIC hay  dos de estas tulpas, la tulpa macho, la tulpa hembra y una representación de la tulpa familiar que nace como homenaje a todas las mujeres resistentes del territorio y su construcción desde la familia, se hace en el marco del programa de la Reparación Colectiva de las violencias ejercidas por el conflicto armado y como iniciativa de memoria para recordar cómo vivían antiguamente las familias, donde se preveía el cuidado de los hijos desde la armonización para inculcar a los hijos los usos y costumbres que desde las abuelas y los abuelos se trasmitían alrededor del fuego. Esta tulpa representa a la mujer y al hombre como complemento con los hijos guiados desde la abuela y él abuelo, dentro de ella hay tejidos hechos por las mismas mujeres, mochilas, yajas, el uso donde las mayoras tejían las cuendas de los chumbes y de las jigras que representan la economía familiar en donde no era necesario que viniera alguien de afuera o que hubiera otros productos para poder subsistir si no que en el mismo hogar se proveía toda la alimentación.

Es por eso que los aprendizajes de estas Tulpas Comunicativas van de la mano del encuentro entorno al fuego, a la escucha y al análisis de lo que pasa en las diferentes comunidades, La Autoridad newexs Eliberto Secue Poto de San francisco acompañó y participó del diálogo trayendo a lugar la memoria, la historia y la contextualización del Resguardo. San Francisco hace parte junto a Tacueyó y Toribío del título colonial de Emanuel de quilo y ciclos de 1701, cuenta con 8.947 habitantes y una extensión de 12.644 hectáreas desde que fue liberada, pero la desarmonía no acabaría con la ida del terrateniente, estos tres resguardos que conforman el plan de vida Proyecto Nasa tenían diferencias políticas y no lograban llegar a acuerdos por lo que comenzó una nueva etapa de violencia, en donde integrantes de las comunidades optaban por ser parte de los diferentes grupos armados causando varias muertes entre los mismos comuneros, el Gobierno estratégicamente sacó provecho de esta situación lo que ocasionó masacres dentro del territorio, estas acciones se convirtieron en el día a día de los habitantes, lo que a través del tiempo afectó la identidad cultural y la forma de pensar debido a la vulneración causada hacía los hombres, las mujeres y los niños. 

Con la llegada del Padre Alvaro Ulcue Chocue se logra retomar a través de los sueño y las proyecciones el territorio, desde entonces el plan de vida Proyecto Nasa retoma e impulsa desde el fortalecimiento de la educación, la revitalización de la lengua materna, los centros wasakwe wesx, luucx lescxkue, como caminos para fortalecer el gobierno propio y la economía desde los proyectos colectivos de diferentes productos: kwesx café, jugos fxi’ze, truchas juan tama, nasalac y proyectos de ganadería. Actualmente la desarmonía del conflicto y la violencia por parte de los grupos armados no ha cesado, si bien los tres resguardos han logrado unirse se han enfrentado al asesinato del kiwethegna jersai de la vereda san Julián, la violenta masacre de dos comuneros cuando hacían un acompañamiento en la vereda el venadillo en donde en una ráfaga salen heridos, el asesinato de la newesx cristina bautista, y los casos de feminicidios de mujeres por parte de compañeros del mismo territorio, por lo cual hay una gran tarea desde el accionar de la justicia propia.

Esta es una de las muchas razonas por la cuales la importancia de hacer una comunicación crítica y reflexiva que permita construir conjuntamente la paz, la vida, la economía, la salud, la educación desde la autonomía y poder reflexionar sobre ¿Cómo se ve el mundo? y ¿Cómo se va a caminar?

“Hay que motivar y fortalecer la comunicación desde el sentir para que sigamos integrándonos   conociendo y liberando el pensamiento, así como se ha liberado la tierra”

Como resultado de estas tulpas cada integrante hará una investigación que contribuirá al proceso de fortalecimiento de la identidad de cada comunidad, para lograr esto se debe comenzar no solo con unos pasos espirituales si no aflorar los dones de cada uno para acercarse al origen de lo que su sentir busca. Desde el CRISSAC, método de investigación desde lo propio donde la primera forma de comunicarse es escuchando se encaminará esta labor investigativa, desde el principio del Uus Pa´peyya (Pregunta con el corazón), pregunta que nace desde el sentir y la espiritualidad, se pregunta es para entender; es importante abrir camino al ir a conversar con el territorio, escuchar a la madre naturaleza para así poder abrir un diálogo entre todos.

“Muchas veces escuchamos para responder no escuchamos para reflexionar, pensar o sentir desde el corazón”

 La investigación es un conocimiento construido entre todos, es un compromiso con la palabra, con el saber y con el poder orientar, se pregunta para poder construir realidades. En primer lugar, hay que ubicarse en una realidad concreta tener claro ¿Qué se quiere saber?, ¿Qué quiere que le cuenten?, tener un sentir de lo que se quiere comprender. Cuando se activa el encuentro se activa la conversación y llega el compartir al hacer estas conversaciones hay que preparase desde lo cultural y desde un conocimiento previo de lo que se quiere hablar, identificar con quiénes y cómo se van a hacer esos acercamientos, las conversaciones no solo son con las personas también se hace lectura del territorio, del contexto y hacer una reflexión, un análisis.

Un compañero decía:

“El nasa todo el tiempo está investigando, uno todo el tiempo investiga solo que uno no se da cuenta, dentro del territorio, dentro de la familia, se observa para preguntar”

En la investigación hay preguntas madres y preguntas hijas que ayudan a entender la dimensión de las preguntas grandes, una experiencia es la que comparte el compañero Jamir del territorio de Tóez, Caloto, participó de la Escuela nasa para la vida en el 2013 hasta el 2015 en este espacio se hace un CRISSAC de investigación y cartografía a productores de 20 resguardos del Cauca, partiendo de las siguientes preguntas madres:

¿Cuál es la situación que viven las familias del territorio?

¿Qué consumían los ancestros?

¿Por qué si el tul es lo máximo no tenemos tul?

Que se identificaban con las siguientes preguntas hijas:

¿De dónde vienen los alimentos que estamos consumiendo?

¿Cuántas y cuáles variedades alimenticias tiene sembrado en sus parcelas?

¿Qué saberes despierta el tul?

¿Qué saberes y sabores despiertan los alimentos y plantas medicinales?

Este trabajo de investigación dejó varias enseñanzas, ya que cada pregunta era respondida por variedades de historia en donde se analizaba lo propio con lo apropiado y al final dejó enseñanzas y reflexiones:

¿Por qué hay desnutrición en el territorio?

¿Por qué aumentan las enfermedades en el territorio?

Se llega a la conclusión de que debido a la disminución en la diversidad de alimentos que se siembran y se comen se ha perdido las semillas nativas y la soberanía alimentaria en la mayoría de hogares.

“Entre menos diversidad de alimento y semillas propias, menos diversidad de pensamiento porque cuando hay diversidad hay variedad de pensamiento”

La investigación va acompañada de la cartografía social, es una herramienta y una metodología participativa, se construye entre varias personas desde la comunicación y la escucha para conocer los diferentes conocimientos de las personas que están siendo parte, genera procesos de reflexión desde la experiencia individual de cada quién sobre el territorio, su propia historia y la historia que conocen del territorio, siendo cada uno parte de la construcción de mapas para identificar problemáticas y hacer reflexiones sobre lo que sucede y proponer caminos de trasformación ya que lo que nutre estos mapas es el conocimiento que se tiene del territorio desde la propia experiencia y del ¿Cómo entienden las relaciones entre los mismos y con el territorio? En medio del dialogo se generan relaciones de respeto y de escucha. Esta herramienta sirve para Identificar, sistematizar y representar saberes que se plasmarán de manera gráfica, para esto hay que recorrer el territorio mentalmente, hacer memoria de lo que se ha caminado, ¿Dónde se ha caminado?, ¿Cuáles son los elementos claves que identifican el territorio?

Los mapas son elementos de poder que desde las instalaciones externas hacía los territorios por eso la importante de hacer un reconocimiento propio y claro desde la perspectiva de los que habitan el lugar.  Anteriormente en los años 70 cuando en la ley 70 se hablaba de “Identificación de los territorios”,  los técnicos que llegaban a hacer estos estudios ponían límites donde las personas no tenían límites definían espacios libres donde las personas tenían otros manejos sobre las tierras, la cartografía social fue posicionada desde la esfera política para controlar e intervenir los espacios.

Hay que tener en cuenta las siguientes preguntas a la hora de hacer trabajo de cartografía:

  • ¿Qué es el territorio para nosotros?
  • ¿Cómo estamos entendiendo el territorio?
  • ¿Qué nos representa el territorio?
  •  ¿Qué significa el territorio?

“Estar unidos de eso depende la resistencia”

Por: tejido de comunicaciones we’jxia kaa’senxi de Corinto

Deja una respuesta